Eres como el último cigarrillo del
paquete, el último rayo de sol en la tarde, la primera estrella que se
aprecia en la noche y la ola que más fuerte choca contra las rocas.
Eres los cinco minutos antes de despertar, la primera gota de agua en
un día de lluvia, el café ardiendo en una tarde de invierno y el helado
más sabroso en una mañana de julio. Eres la canción más bonita de
todas, la montaña más alta y el valle más verde. Eres la sandía más
dulce, el chocolate más amargo y el pintalabios más rojo.
Buscas
cambiarme los planes, un futuro controlado, un presente inolvidable y
un pasado ya olvidado, buscas que no exista la palabra pensar en
nosotros. Que las estrellas solo sean eso, estrellas y que por ello nos
alimenten los besos sin sentido, el café de la mañana y tu cuerpo junto
al mío. Que no existan las caricias con segundas intenciones, que ni
primavera ni otoño, únicamente invierno y verano, noche y día y
amaneceres aún mejor que los anocheceres. Que el sentir se quede bajo el
colchón.
Yo no quiero otros sueños, otros besos ni otras manos, revolviendo mi pelo.
No me gustaria otra fecha distina, con un primer "Te quiero" dicho por otra voz diferente a la suya,
No quiero ir otros cumplidos, susurros ni respiraciones cerca del oido, ni vivir otra historia diferente a la que tengo con el.
No, no tengo una vida perfecta, pero si algo es perfecto, es mi
felicidad desde que estoy con él, y no quiero otra que no séa esa.
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